Sentís de pronto como la vida cambio, todo lo que antes tenía
sentido, ahora simplemente es algo que paso y sentís que el tiempo nunca es
suficiente, más que nada es eso, como el tiempo se te escapa sin darte cuenta
que respiras y que estás vivo. Dejas muchas cosas de lado, te olvidas otras,
incluso esas que no debías postergar, de pronto desaparecen los fantasmas debajo
de tu cama. Se rompe el silencio y las cosas que antes parecían estables
vuelven a temblar y es como si nunca
nada pudiera tener una salida.
Y si queres parar, no es tan fácil, porque todo sigue, porque
nada, ni nadie detiene su paso y de pronto te encontras inverso en el mundo, ahí
parado entre tanta gente, cada una con lo suyo, quizás pretendiendo ser uno más
del montón, quizás siéndolo.
Y de repente te detenes un segundo, el tiempo suficiente
para darte cuenta que alguien esta sonriendo, que alguien llorando, que alguien
tiene miedo, que alguien está cansado, que alguien hoy no tuvo un buen día, que
alguien hoy se siente mal, que alguien todavía no perdió las esperanzas, te das
cuenta que no estás solo en la multitud y que a todos les pasa un poco de lo
que te pasa…
Tal vez sea solo cuestión de tiempo, algo quizás llene de
música este silencio, sin embargo nos queda mucho por hacer, no importa que, ni
cómo, ni cuando, algo quizás puede cambiar…
"Que volver no implica retroceder,
Que retroceder también puede ser avanzar,
Que no por mucho avanzar se amanece más cerca del sol,
¿Cómo hacerte saber que nadie establece normas salvo la vida?"
Que retroceder también puede ser avanzar,
Que no por mucho avanzar se amanece más cerca del sol,
¿Cómo hacerte saber que nadie establece normas salvo la vida?"