Siempre de
alguna manera puede existir ese algo o ese alguien que nos ilumine la vida, que
haga que por más que pasen cosas “no tan lindas” podamos seguir sonriendo. A veces
es cuestión de saber dar gracias por lo que tuvimos, por los buenos recuerdos,
de hacerle un rincón en el alma y desempolvarlo para volver a sonreír. De
alguna manera nunca vamos a tener todo pero no importa no tenerlo todo, importa
saber valorar lo poco o lo mucho que tenemos, saber cuidarlo y deleitarlo. La vida
se trata de muchas cosas y estoy segura que de una de las cosas de que se trata
la vida, es abrazar las sonrisas, es desparramar lagrimas de alegría, es
encontrar pequeños segundos de felicidad, es encontrar ese alguien que quizás estaba
ahí y no lo veíamos realmente, es dar la mano, es aceptar las imperfecciones, y
saber que no podemos ser perfectos, ni que todo el mundo puede amarnos, que
somos lo que somos y no podemos cambiarlo pero si mejorar y que vale la pena
encontrar esos simples gestos que nos dan quienes amamos.
Vivir no es sólo existir, sino existir y crear, saber gozar, sufrir y no
dormir sin soñar. (Gregorio Marañon)
Esta
entrada es para mis seguidores, lectores, comentaristas, escritores, y para
esas personas que nos dan un motivo para sonreír. Gracias!